Esa misma noche hablan Julián, Alberto y Miguel sobre este hecho, y todos están de acuerdo en que Germán es importante para el grupo, pero que no puede ser que esté en dos grupos tan distintos entre sí, y que además ya prácticamente no haga caso de su pertenencia al de ellos. Pese a esto, y aunque realmente ya tengan todos los músicos que hacen falta, Julián deja definitivamente en ese otoño la batería, y se dedica exclusivamente a la guitarra, de modo que se ven forzados a utilizar ya siempre baterías programadas.